miércoles, 20 de mayo de 2015

Si el plan no funciona, cambia de plan, pero nunca de meta !


Hola gente!!! Ayer estaba con mi marido, los dos sentados en el sofá leyendo, y me dijo una frase que me encantó: “Si el plan no funciona, cambia de plan, pero nunca de meta”, en cuanto me la leyó, pensé en vosotras… es la descripción perfecta de lo que yo quiero transmitir con mi trabajo a mis pacientes!!!!!!

Y creo que es TAN importante no perder la perspectiva en este camino de la infertilidad, a veces, tan infernal… el hecho de que hayamos hecho una inseminación y no haya funcionado, el hecho de que llevemos tres fecundacionesin vitro y no haya funcionado….y mil ejemplos más que os puedo poner… estos hechos, no nos tienen que hacer pensar que “ya, se acabó”, NOOOOO.
Lo que tenemos que hacer es parar, calmarnos, coger aire y seguir. Si hemos tenido tratamientos de reproducción asistida y no han funcionado, sigamos investigando, cambiemos de profesional e incluso de medicina!! Veamos qué nos está afectando, veamos qué nos ocurre física y emocionalmente, para que ese bebé todavía no haya venido a nosotros.
Veamos si tenemos un problema que todavía nadie ha visto… quizá un problema de tiroides, o un problema autoinmune, o puede que tengamos endometriosis o Adenomiosis, o un problema de coagulación, o quizá un problema anatómico en el útero, y no nos olvidemos del esperma, quizá hay un problema genético…. La mayoría de estos problemas o patologías tienen solución, por lo tanto, no tiremos la toalla a la primera, vale?
Y si resulta que realmente no hay nada físico, que todo está bien, o no, y con técnicas no lo hemos solucionado… pues vamos a ver si tengo un bloqueo emocional, veamos qué le pasa a mi cuerpo, y sobre todo, porque le pasa y solucionémoslo!!!! Hoy en día hay tantas salidas y soluciones a los problemas… que sería horrible quedarnos solo con una cara de la moneda…
Y lo mismo os digo en el caso contrario, ojo, si lo que hemos probado es la medicina natural, si hemos trabajado y solucionado los bloqueos que teníamos, pero aun así no llega, vamos a la tecnología, claro que sí!!!! Quizá lo que necesitamos es un ayudita de la ciencia para unir ese ovulo con ese esperma, y qué pasa? No pasa nada por dejar que nos ayuden!!!!
Entendéis lo que os digo? Tenemos que cambiar de plan, claro que sí, pero no perder de vista la meta, porque esa queridas, esa no cambia, y podemos trabajar incluso, con dos planes a la vez, claro!!
Motivos para no Abandonar
Realmente, piénsalo desde el corazón, realmente, porque un plan esté mal enfocado, mal ejecutado o simplemente a ti no te funcione, realmente, vas a cambiar la meta???
Alguien dijo una vez que la energía no se destruye solo se transforma, hoy va la cosa de frases, y lo podemos aplicar a nuestro proceso, porque la energía maternal-paternal, existe!!!!! Y no tenemos que enmascararla, ni destruirla, jamás!!!!!
Si somos de los que finalmente no hemos tenido hijos, podemos enfocar esa energía en CREAR, la energía maternal es creadora, y si no la focalizamos, os aseguro, que caeremos enfermos!!!
Podemos crear y crear, tantassss cosas!!!! Cuando hayamos decidido que hasta aquí hemos llegado en la búsqueda del bebé, en ese momento, coge toda esa energía que tienes, aunque no te lo creas, pero la tienes, descansa, reponte de este palo que te ha dado la vida, y ponte a crear, ponte a ser “madre” de un negocio, de una web, de una ilusión…os puedo asegurar que la vida no se acaba, y como os digo siempre, si no os veis con fuerza para enfocarlo, hay gente que se dedica a eso, a ayudaros, a daros las armas para seguir viviendo felizmente, no paséis por esto solas, por favor, pedid ayuda….no me cansaré de decíroslo, nunca!!
Porque no hay color! Pasar por una depresión, por la ansiedad, por ataques de pánico, o por un duelo que se nos ha convertido en eterno, pasar por el sufrimiento… no hay que hacerlo solas, no tenemos que ser tan egoístas, hay que compartir, sobre todo el sufrimiento…. Vale? Así que si estás mal, pide ayuda!!!!!
Uffff hoy me he levantado demasiado sermoneadora!! Pero quedaos con tres cosas importantes de este artículo, que como siempre os dedica a vosotras.
Uno: no cambies de meta, cambia el plan para llegar a la meta, nada más.
Dos: La energía no se destruye, solo se transforma.
Tres: Estás mal, pide ayuda, que no te de vergüenza, la única que pierdes si no la pides, eres TU.
Así que ya tenéis para pensar mucho en los próximos días jijijijijij
“No tires la toalla, hazte un bonito turbante”.

viernes, 8 de mayo de 2015

Energy-Drinks in der Schwangerschaft

Ein hoher Koffeingenuss während der Schwangerschaft kann zu geringem Geburtsgewicht führen, dies widerum zu weiteren gesundheitlichen Problemen später im Leben. Zu viel Koffein kann außerdem zu Aborten führen.

Koffein findet man in verschiedenen Lebensmitteln, wie z.B. in Kaffee, Tee und Schokolade. Es wird auch einigen Soft- und Energy-Drinks zugefügt. Auch einige Erfältungs- und Grippemittel enthalten Koffein. Fragen Sie Ihren Arzt, Apotheker oder Ihre Hebamme bevor Sie diese Medikamente einnehmen.

Sie müssen nicht komplett auf Koffein verzichten, allerdings sollten Sie nicht mehr als 200mg pro Tag zu sich nehmen. Das entspricht ungefähr der Menge in 2 großen Tassen löslischem Kaffee oder vier Tassen mittelstarkem Tee oder heißer Schokolade oder sechs Tassen Cola pro Tag. Um die Koffeindosis pro Tag zu senken steigen Sie um auf koffeinfreien Kaffee und Tee, trinken Sie Fruchtsäfte oder Mineralwasser anstelle von Tee, Kaffee, Cola oder Energy-Drinks. Wenn Sie einen Energy-Drink zu sich nehmen, achten Sie auf die Angaben auf dem Etiket. Eine Dose Red Bull z.B. enthält 80 mg Koffein. Eine Tasse Kaffee kann mehr oder weniger Koffein enthalten, das kommt natürlich auf die Größe der Tasse und die Stärke des Kaffees an. An Tagen an denen Sie Red Bull trinken, sollten Sie weniger andere koffeinhaltige Getränke (Limonaden, Ginger Ale, Coca-Cola etc.) zu sich nehmen.
Generell sollten Sie in den ersten drei Monaten der Schwangerschaft keine medizinischen Kräuter einnehmen. Während der Schwangerschaft eingenommene pflanzliche Arzneimittel oder Medikamente können Geburtsdefekte verursachen (Teratogenität). Der Zeitraum mit dem größten Risiko für Missbildungen sind die Wochen drei bis 11 der Schwangerschaft. Es bleibt aber zu erwähnen, dass die Einnahme dieser Wirkstoffe während aller Phasen der Schwangerschaft negative Effekte auf den Fötus und dessen Entwicklung haben können.

Tees, die Sie in Ihrem lokalen Supermarkt in Teebeuteln kaufen können, sind in der Regel sicher wenn Sie nicht im Übermaß genossen werden. Pfefferminze-, Früchte-, Ingwer- und Jasmintees gibt es überall und sie sind eine gute Alternative zu koffeinhaltigen Tees. Seien Sie jedoch vorsichtig mit:
- Kamille, Nessel und Eisenkraut: Sie stimulieren Kontraktionen der Gebärmutter.
- Aloe Vera gilt als möglicherweise unsicher für jedermann. Es ist es ratsam, sie mit äußerster Vorsicht zu verwenden, wenn Sie schwanger sind oder stillen. Aloe Vera wurde mit Geburtsdefekten und Fehlgeburten in Verindung gebracht. Auch für Kinder ist die Einnahme nicht angeraten, da es zu Magenkrämpfe und Durchfälle kommen kann.
- Auch Ginseng gilt es zu meiden, da es eine östrogenähnliche Wirkung besitzt.

Es gibt Teemischungen speziell für schwangere Frauen. Stellen Sie sicher, dass diese von einem seriösen Anbieter stammen. Sprechen Sie mit Ihrer Hebamme oder Ihrem Arzt bevor Sie irgendwelche Arzneimittel einnehmen und fragen Sie nach einer detallierten Aufstellung der Produkte die während einer Schwangerschaft sicher eingenommen werden können.

jueves, 7 de mayo de 2015

Adoption contra Surrogacy - if there is no other chance

Dr. Peter Hermann : - 

Surrogacy should be the last chance. If there is no other possibility or an unacceptable risk for child and mother, then of course. Not because of the costs or the legal complexity. It is because You, as intended mother, wave the advantage of that unique symbiosis between Your own mother, You Yourself and Your forthcoming child. You wave to carry the cells of Your child in Your body and vice versa. So, a GC( gestational carrier or surrogate) carried baby is very near to an adopted baby, even if the eggs are deriving from the IM. The gamete genetics is not that important. To carry-out is the key-factor. This factor is not measured in this study. It could not.

Not astonishing, that the outcome using own eggs is not very different. First, the indication might be some times too weak. Second, the factors, which lead to GC-engagement, do mostly not affect the embryo-quality. As shown, the uterine factors avoidance result in higher baby-take-home rate.
Surrogacy has to be seen as an extreme extension of technical and legal possibilities. Using a healthy, proven good gestational carrier with experiance, donated eggs from proven fertile Young woman and perfect semen from host or bank, then we have reached the absolute highest achievable goal in ART. Moreover, irrespective age. Theoretically You get adopted an completely designed baby at what age ever the Intended parents are. This is the challenge in consultation which such clients.
But, we promote this technique very strongly, because the legal concerns in some countries could be resolved. Doing it without that security of a happy end, it is still today literally russian roulette. Or Indian roulette.

http://www.ehowenespanol.com/definicion-madre-sustituta-sobre_352851/

https://www.facebook.com/GenipletPalma?ref=hl

martes, 14 de mayo de 2013

Madres a los 50

Martes, 14 Mayo, 2013
La esperanza de vida de las españolas está ya en 85 años y vamos hacia una maternidad cada vez más tardía

De haber nacido en el hospital, a Oliver se lo habrían llevado corriendo a la incubadora. Pero su madre cogió aquel bebé «flacucho» (1,840 kilos) y lo metió con ella a la cama, pegado a su pecho. Sigue allí, aunque ya ha cumplido 2 años. «Cuando mis padres me sacaron de su cama fue un trauma, así que duerme con nosotros. Él en una esquina, su padre en la otra y yo en medio. Y sigue mamando, le dejaré hasta que quiera. Con mis otros hijos tuve remordimientos porque la gente empezó a decir que la lactancia no era sana, pero ahora estoy segura de que es lo mejor». Eva Denes, húngara, 51 años la semana que viene, tiene la prueba en Mate (23 años), Rebeca (21) y Blanca (14), sus otros tres hijos. No esperaban más, pero en «un desliz» llegó «el regalo». «Me quedé embarazada con 48 años. Cuando me enteré pensé: ‘¡Oh, Dios mío! ¿Qué va a decir la gente?’. En mi país es raro ser madre tan mayor, pero me dijeron que en España no era tan extraño y eso me tranquilizó».

Eva es una de esas «madres tardías» que ha dado a luz rozando los 50, un colectivo cada vez más amplio. En 2011, último año del que tienen datos en el Instituto Nacional de Estadística, nacieron 102 bebés de mujeres mayores de 50 años, cinco veces más que hace diez años (20) y diez veces más que en el 90 (12). La esperanza de vida de las españolas alcanza ya los 85 años. «En los 60 y 70 la ecuación era boda y niño. Y si tardabas mucho ya empezaban a señalarte y decir a ver quién era el que no funcionaba. La prioridad era el hijo, pero hoy es el trabajo. Las chicas no van a la Universidad y hacen un máster para quedarse en casa cuidando del marido y del niño. Y como la emancipación y la estabilidad laboral se han retrasado, la maternidad también. La edad media a la maternidad se ha elevado hasta los 31,5 años, pero cada vez habrá más mujeres mayores de 40 que serán madres primerizas», advierte Luis Ayuso, sociólogo experto en familia de la Universidad de Málaga. Mujeres que, por edad, podían ser abuelas. Pero son madres y hoy, primer domingo de mayo, es su día.

Así que en casa de Irma Soriano habrá bizcocho «de harina integral y azúcar moreno» de postre. Y una feliz bullanga con seis a la mesa: la propia Irma, su marido Mariano, Triana (23 años), Antonio (11), Carmen (4) y Luis Juan, 7 meses que parecen más. La presentadora jienense cumplirá 50 años el próximo septiembre y es una de tantas famosas que han estirado la maternidad hasta donde lo permite la naturaleza y la ciencia.

Sus dos últimos hijos han nacido por fecundación in vitro. «Después de divorciarme conocí a mi marido actual y desde el principio de nuestra relación tuvimos claro que queríamos tener hijos en común. Los primeros cinco intentos dieron negativo. Cuando te lo dicen te sientes vacía, pero a la sexta funcionó». Y nació Carmen (3,050 kilos), «la loca avería». «Mi hijo Antonio estaba en la puerta del quirófano. Fue el primero que la vio y hoy tienen una relación alucinante».

Con tres criaturas en casa, Irma sentía que tenía que «cerrar el círculo» y fueron a por Luis Juan. «Cuando se lo dije a mi madre se disgustó, le preocupaba mi salud». El embarazo fue bien hasta la semana 36. «Estaba de nalgas y tenía dos vueltas del cordón al cuello. Un día noté una especie de calma chicha rara, no notaba al bebé en el vientre. Me puse boca abajo para fastidiarle a ver si se movía, pero le habían bajado mucho las pulsaciones. Oí a la comadrona: ‘No va a aguantar’ y entonces les dije: ‘Ya me estáis rajando’». Luis Juan nació por cesárea y enseguida le tuvieron que ingresar con bronquilitis, pero hoy pesa ya 8 kilos y no deja de reírse por todo. «¡Por fin consigo que un hombre se vuelva loco conmigo! Si mamá está en la habitación ya no existe nada más en el mundo...». Y viceversa.

– Cuando nació Triana usted tenía 26 años y 48 con Luis Juan. ¿Cómo se vive la maternidad a edades tan dispares?

– Yo llevaba esperando a Triana desde siempre, desde que nací, desde que jugaba a ser mamá con mis muñecas y con mis amigas de la escuela. Fue una ilusión absoluta, recuerdo cómo la olí, aunque su parto fue el más doloroso. Con ella todo eran incertidumbres, así que me guiaba por el instinto, que hace que aciertes siempre. Lo del pequeño fue una lucha por la vida, me jugaba mi salud. Ahora tengo experiencia, aunque a veces eso me hace complicarme más. Y cuando tiene fiebre echo a correr igual.

«Tengo más paciencia»

Eso es ser madre, la edad no importa. Aunque a Eva Denes, Oliver le trajo, precisamente, la calma que le faltó con los anteriores. «Soy mucho más madura y tengo más paciencia. Ya he trabajado y he viajado, no siento que el niño me robe tiempo o que me esté perdiendo nada porque ya lo he hecho todo. Soy ‘coach’ de crecimiento personal y trabajo desde casa. Quiero pasar todo el tiempo que pueda con él».

Irma comparte con Luis Juan las 24 horas del día. Y se le quedan cortas. «Voy a grabar a 13 TV las presentaciones de las películas del western y vuelvo a la velocidad del rayo. Con Triana me incorporé enseguida al trabajo. Me llamaron de TVE para grabar una gala sobre Lola Flores en Miami y dejé a mi bebé de dos meses para ausentarme quince días. Me dejé convencer y corté la lactancia. A Luis Juan sigo dándole pecho. Porque la leche materna es... ¡ni la fórmula de la Coca Cola!»

Le da pecho de día o de noche, cuando lo pide. «Llevo sin dormir bien desde que nació, pero luego le abrazo y pienso: ¿qué es una mala noche? Además, aguanto mejor que cuando era más joven». Y Eva, con una edad y una experiencia similar a la de Irma, lo confirma. «Las noches en vela son igual con 25 que con 50 años. Oliver solo nos ha dado dos noches malas».

Ni siquiera dio guerra la primera. «Mis otros tres hijos nacieron en el hospital, pero a él lo tuve en casa por elección. Me sentía capaz y sana. Nació una mañana, a las seis menos cuarto, en nuestra habitación. Sus hermanos estaban durmiendo y no se enteraron de nada. Cuando le vieron se sonreían con un poco de vergüenza». Eva buscó a «un ginecólogo avanzado» que no la tratara «como a una mujer de 48 años». Aunque los tenía.

«La edad es un factor determinante para ser madre, aunque muchas mujeres se cierran el oído. A partir de los 40 años la maternidad es complicada. Los hijos hay que tenerlos pronto, el coche y el piso van después. La sociedad está montada al revés». Pedro de la Fuente habla desde su experiencia al frente del Centro de fecundación in vitro de Asturias (Cefiva), una de las clínicas más antiguas de España. Y apoya su argumentario con cifras: «Las expectativas de embarazo a partir de los 40 no pasan del 25%. La menopausia aparece entre los 45 y los 50 años. Hemos avanzado en nivel de vida, pero la fertilidad se para en su momento y el ovario a esa edad es igual de viejo que en la era de los romanos».

5.000 euros por intento

Él empieza a contar hacia atrás a partir de los 30: «Entre 35 y 40 años las posibilidades se reducen drásticamente» y ahí entra en juego la reproducción asistida, que ha dado un vuelco a los números. «Si las mujeres que recurren a la fecundación in vitro lo intentaran cuatro veces, el 80% se embarazaría», calcula el ginecólogo. El problema es que cada tratamiento sale por 4.000 ó 5.000 euros y que en la Seguridad Social no suelen atender a mujeres mayores de 39 «por criterios de eficiencia» –lo determina cada comunidad–. La ley no pone tope de edad a las clínicas privadas, aunque la Sociedad Española de Fertilidad aconseja no realizarlos más allá de los 49 por riesgo para la madre. «La mujer primero lo intenta con el óvulo propio, pero si tiene más de 40 años, de 10 candidatas lo conseguirán solo 2 ó 3. La otra opción es el óvulo de una donante, una chica menor de 30 años».

Cuenta De la Fuente que muchas mujeres se tratan hasta en seis ocasiones. «Hoy todos los hijos son deseados y planificados. Los abortos han aumentado, y también los tratamientos de fertilidad, lo que demuestra que la mujer quiere controlar el proceso de fecundidad. Ya no hay descuidos». Ni familias como las de antes, de 7 hijos. «Vamos hacia el modelo de pareja sin hijos o con un hijo tardío», alerta el sociólogo. Y asusta con los datos: «El relevo generacional se garantiza con 2,2 hijos por mujer, y estamos en 1,36. Los nórdicos tienen las mayores tasas, pero del 1,8».

– ¿Qué les anima a tener hijos y qué nos desanima a nosotros?

– Las políticas familiares. Aquí el hijo es un coste privado y la gente te dice: ‘¡No haberlo tenido!’. En el norte de Europa es un problema público, de la sociedad. En Francia el Estado te paga 350 euros al mes por cada niño y en Alemania cuando se desplomó la maternidad desarrollaron políticas de fomento de la natalidad y ahora están debatiendo incluir en la pensión de jubilación una prima por hijo. No es justo que un matrimonio con 3 tres niños que no pudo trabajar mucho tenga una jubilación baja y otra pareja sin hijos tenga una pensión alta pagada por los hijos de otros.

– Aquí tuvimos el cheque bebé de Zapatero de 2.500 euros.

– ¿Y qué efecto tuvo? Igual era más importante haber hecho más guarderías de cero a tres años. No es solo una cuestión de dinero.

En los 90 la modernización de la sociedad, la incorporación de la mujer al trabajo y el desarrollo de los anticonceptivos hundió la natalidad en España –«tuvimos menos hijos que durante la guerra»–. Y la crisis solo va a empeorar el panorama. «Los hijos se tienen cuando hay perspectivas de mejorar. En época de crisis la natalidad siempre baja», advierte Ayuso. Lo confirman los datos del INE: desde 2008 los nacimientos van en descenso al ritmo de un 3% cada año. En 2011 nacieron 470.553 bebés. Por eso Irma y Eva son ‘rara avis’. No tanto por ser madres mayores, sino por prole. «Hay quien te llama egoísta por tener niños. Ymás a esta edad».

– ¿Piensa en el futuro?

– Pienso en estar sana –dice Irma–.

– ¿Le han hecho sentir como una abuela alguna vez?

– En un centro comercial de Málaga una mujer me preguntó si el niño era mi nieto y le dije que solo tengo años, que no soy mayor. Y cuando mi hijo Antonio me vio con gafas se asustó porque le parecí mayor. Pero corro detrás de ellos como antes.

Y atiende con infinita paciencia de madre las cuitas de cada uno. «Triana está terminando Derecho y va a opositar a Notaría. Antonio está con el fútbol, y me tiene loca porque no se quiere poner el aparato de los dientes. Carmen no quiere merendar y Luis Juan anda con mocos». El pequeño reclama ya a mamá. Igual son los mocos. O que le está saliendo el primer diente. A Irma esos detalles no se le pasan. «Tengo apuntado todo, lo que pesaban semana tras semana, lo que llevaban puesto el día que vinieron del hospital. Guardo los ‘predictor’, ¡hasta las tiritas que les pusieron en el ombligo!» el día en que llegaron para hacerla la mujer más feliz.

Fuente: 
El correo.com

lunes, 8 de abril de 2013

Gesellschaftlicher Fortschritt gegen die Natur


Das bringt eine gefährliche Unwucht in die Beziehung. Der unfruchtbare Partner muss nicht nur mit der eigenen Unzulänglichkeit fertig werden. Ihn quält auch noch das Schuldgefühl, dem gesunden Gegenüber einen Herzenswunsch, ein zentrales Moment des gemeinsamen Seins vorzuenthalten. Der Gesunde wiederum sieht sich mit einer Entscheidung konfrontiert, die er nie hatte treffen wollen: Mit einem anderen Partner könnte es ja gehen. Warum also zusammenbleiben?

Drittens: Der gesellschaftliche Fortschritt stellt sich zunehmend gegen die Natur. Und es scheint, dass wir noch keine tragfähige Lösung für diesen Konflikt gefunden haben.

Das Problem ist der Zeitpunkt, zu dem der Kinderwunsch heute üblicherweise einsetzt. Viele Frauen in Deutschland bekommen ihr erstes Kind inzwischen erst, wenn sie älter als 30 Jahre sind. Der Anteil der Erstgebärenden über 36 Jahren macht knapp ein Fünftel aller Mütter aus. Viele Frauen sind heute besser ausgebildet als früher. Sie wollen zuerst arbeiten, bevor sie sich auf eine Familie festlegen. Zudem fordert der Arbeitsmarkt von ihnen eine hohe Flexibilität, die schwer mit dem Muttersein zu vereinbaren ist.


Doch die Wahrscheinlichkeit, schwanger zu werden, liegt bei einer Frau von 30 Jahren nur noch bei rund 60 Prozent, mit 40 Jahren unter 40 Prozent. Wenn viele Frauen sich für ein Kind bereit fühlen, hat fast die Hälfte von ihnen nur noch schlechte Chancen. Und nicht einmal ein Drittel der Versuche künstlicher Befruchtung führt zum Ziel.
Dieses Problem trifft auch die Männer. Obwohl sich die große Mehrheit von ihnen Kinder wünscht, ist der Anteil derer, die dauerhaft kinderlos bleiben, auf fast ein Viertel gestiegen. Und er wächst weiter. Das hat einerseits mit ihren Frauen zu tun. Andererseits unterschätzen viele Männer, dass auch ihre Fruchtbarkeit trotz aller Geschichten über alte Väter begrenzt ist. Dass ein Mann, der älter als 40 Jahre ist, zum ersten Mal Vater wird, ist statistisch selten.

So werden Millionen von Frauen und Männern mit ihren Erwartungen an ihr Leben, den Fortschritt und die Freiheit konfrontiert. Auch mit ihrer eigenen biologischen Verfassung. Viele leiden still darunter, manche zerbrechen daran. Doch andere schaffen es, mit der psychologischen Belastung fertig zu werden. Indem sie die Hoffnung nicht aufgeben. Indem sie andere Wege finden, ihr Leben zu vervollständigen. Oder indem sich der Wunsch nach einem eigenen Kind am Ende doch erfüllt. Davon handelt diese Themenwoche.

Schicksal ungewollt kinderlos

Wer kein Kind bekommen kann, leidet im Verborgenen. Zwar gilt Zeugungsunfähigkeit als medizinisch behebbar, aber sie ist gesellschaftlich ein Tabu.

Ein Kind ist geboren, wenn es das erste Mal gedacht wird. Wer einmal den Gedanken daran zugelassen hat, Nachkommen zu zeugen, der kommt nicht wieder dahinter zurück. In der Fantasie ist das Kind dann schon da, selbst wenn real noch gar nichts dafür getan ist.
Wenige Dinge wirken so stark auf das Selbstbild des Menschen wie die Fähigkeit, sich fortzupflanzen. Drei Viertel aller Deutschen unter 50 Jahren wünschen sich Kinder. Obwohl die Geburtenraten hierzulande sinken, obwohl die Familien kleiner werden und Eltern bei der Geburt ihres ersten Kindes immer älter sind, bleibt die Möglichkeit, Nachwuchs zu bekommen, ein elementarer Bestandteil eines jeden. Wichtiger noch, als Kinder zu haben, ist die Sicherheit, welche haben zu können.

Für mehr als sechs Millionen Bürger ist das ein großes Problem.

Sie haben keine Kinder, obwohl sie sich welche wünschen. Und sie leiden darunter. Ungewollte Kinderlosigkeit ist ein Zustand, der nicht der gesellschaftlichen Norm entspricht. Zwar gilt Zeugungsunfähigkeit heutzutage als ein medizinisch behebbares Problem; in der Gesellschaft aber ist sie ein Tabu.

Widerspruch zwischen Medizin und öffentlichem Diskurs

Dieser Widerspruch ist befremdlich. Über Methoden der künstlichen Befruchtung wird viel und detailreich berichtet. Ungewollte Sterilität ist von der Weltgesundheitsorganisation als Krankheit anerkannt. Über die Modalitäten von Adoptionen wird gerade wieder lebhaft diskutiert. Doch kaum eine Frau mag über den Kreis ihrer engsten Freundinnen hinaus darüber sprechen, wenn sie Hormone nimmt, um ihre Fruchtbarkeit zu stimulieren – Männer noch viel weniger. Wer wie die Autoren dieser Themenwoche nach Menschen sucht, die öffentlich über ihre Erfahrungen mit der künstlichen Befruchtung reden und auch über das Scheitern daran, trifft auf große Zurückhaltung. Diejenigen, die sich entschließen, davon zu erzählen, tun es oft nur anonym.

Drei Gründe lassen sich dafür finden. Sie rühren an den Kern unserer Identität. Alle haben wenig mit dem Kind zu tun, sondern viel mit den potenziellen Eltern.

Eigennutz

Erstens: Fragt man Psychologen, warum Menschen sich Kinder wünschen, lautet ihre Antwort fast immer, es gehe um Selbstverwirklichung. Dahinter treten die althergebrachten Motive zurück: Arterhaltung, wirtschaftliche Absicherung, soziale Konformität.
Was den Kinderwunsch vieler Menschen heutzutage antreibt, ist beispielsweise die Vorstellung, mit dem weitergegebenen Leben ein Ebenbild von sich selbst schaffen zu können und so ein Stück Unsterblichkeit zu erlangen. Manche projizieren Glücks- und Heilserwartungen auf das Kind, die das eigene Leben nicht anzubieten hat. Andere hoffen darauf, bedingungslos geliebt werden. Oft ist es auch die Angst, im Alter einsam zu sein. "Zutiefst persönliche Ursehnsüchte kreuzen sich hier mit einem utopischen Begehren nach einer besseren Welt", schreibt die Autorin Millay Hyatt über ihre eigene Kinderlosigkeit.

Dieser Egoismus ist Paaren, die kein Problem mit dem Kinderkriegen haben, selten bewusst. Sie werden auch nicht danach gefragt. Doch jene, die sich medizinisch um Nachwuchs bemühen, hören schnell: Warum ist Euch das so wichtig? Ehrlich zu antworten hieße Eigennutz zuzugeben. Oder Naivität. Schweigen aber lässt diese Motive nicht verschwinden. Sie sind tief in uns verankert. Argumente helfen da nicht weiter.

Unwucht in der Beziehung

Der zweite Grund: Der unerfüllte Kinderwunsch untergräbt ein Bild unseres modernen Lebens, nämlich das des emanzipierten und gleichberechtigten Liebespaares. Von außen wird Kinderlosigkeit oft als Problem eines Paares betrachtet. Er und sie können eben keinen Nachwuchs bekommen. So aber ist es nur in einem kleinen Teil der Fälle. Viel öfter könnte sie schon, wenn er fruchtbar wäre; oder umgekehrt.

miércoles, 3 de abril de 2013

Una de cada seis parejas en España, sufren de infertilidad

Tener un hijo no es fácil, sobre todo para las parejas que sufren infertilidad, que en España son una de cada seis. Con la crisis ha caído la demanda de técnicas de reproducción asistida, un proceso largo pero que en el 40% de los casos da sus frutos

Miguel y Sara se están sometiendo a un tratamiento de inseminación artificial. Reconocen haber dejado lo de ser padres "para muy tarde", pues están a punto de cumplir los 40. Dentro de dos o tres semanas sabrán si el tratamiento ha funcionado, ya que las posibilidades de éxito rondan el 40%, según datos de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF). La realidad es que cada vez más parejas españolas en edad fértil, hasta el 17%, en torno a un millón, tienen problemas de infertilidad, por la edad, enfermedades o disfunciones en el sistema reproductor. Y unas 100.000 de ellas recurren cada año a este método o a técnicas similares en alguno de los 217 centros especializados, 180 privados y 37 públicos, que existen en España. El presidente de la SEF, Federico Pérez Milán, niega que la asistencia y el tratamiento de la infertilidad sean un lujo o un capricho propio de la presión social y pide que sea tratada como una enfermedad, como aconseja y la considera la OMS, "ya que es cada vez más frecuente y afecta a una función biológica y tan importante como la respiratoria o la cardiovascular, por ejemplo".

La ginecóloga barcelonesa Laura Cortés Laguna asegura que la cultura de buscar ayuda especializada entre las parejas afectadas va en aumento, incluso entre las de edad elevada. "Hay mujeres que no aceptan no poder quedarse embarazadas, porque su vida gira en torno a ello, y difícilmente se quedan en casa. La infertilidad no resuelta, además de ser la expresión de una enfermedad e incluso ocasionarla, puede causarles trastornos psicoemocionales", advierte.

LISTAS DE ESPERA DISPARES
Según el registro de la SEF, hecho suyo por el Ministerio de Sanidad, los centros que no dependen del capital público acaparan dos de cada tres procesos de fecundación, debido sobre todo a la rapidez de su atención. En el servicio público, aunque es muy parecido en todas las comunidades, la demora es variada y puede oscilar entre seis meses y tres años, según Pérez Milán, jefe del servicio de reproducción asistida del Hospital Gregorio Marañón de Madrid. Pero los ciclos iniciados en la sanidad pública solo representan un 7%.

"Aquí la lista de espera no existe. Procuramos que se pueda acceder a los tratamientos lo más rápidamente posible, ya que la demora tiene efectos negativos, tanto por la edad como por los indicadores emocionales", asegura Agustín Ballesteros, de Barcelona, integrado en el grupo con mayor actividad en este ámbito, con 16 centros en España y 23 en todo el mundo. Junto al abanico de tratamientos (inseminación artificial, fecundación in vitro, inyecciones espermáticas, implante de ovocitos, etc. ), España es pionero en técnicas de vitrificación o congelación de óvulos, que permiten preservarlos para un posible uso después de los 40 años con una supervivencia muy alta y una efectividad similar a cuando la madre tenía 30 años.

MÁS MUJERES SIN PAREJA
Casi 37 años es la edad tipo de las consultantes por primera vez en estas clínicas. Los especialistas han constatado que aumenta en paralelo al retraso del matrimonio, que según el INE se sitúa ya de media por encima de los 31 años. Y hacen una advertencia casi obvia: las tasas más altas de embarazo exitoso se dan cuanto más jóvenes sean las madres.

En Catalunya, donde ya el 3,7% de los niños vienen al mundo gracias a las técnicas de reproducción asistida, el número de mujeres que recurren a ellas sin pareja se ha triplicado en la última década. Un reciente informe de la Conselleria de Salut asegura que la mitad de estas son extranjeras, sobre todo de países como Francia, Italia y el Reino Unido, debido a que la legislación española sobre reproducción asistida y donación de óvulos y semen es más avanzada y permisiva, sobre todo para mujeres solas y parejas homosexuales. Las normas británicas, por ejemplo, no blindan el anonimato de los donantes de semen y exigen tener pareja. Los precios españoles también son otro atractivo.

LOS COSTES
El coste de los tratamientos oscila, según la técnica que se aplique, entre 1.000 y 6.000 euros. ¿Por qué son caros? Pérez Milán y Ballesteros explican que es necesario contar con profesionales altamente especializados y equipos tecnológicos muy avanzados. «Gracias a ellos se ha logrado una mayor eficacia en los tratamientos, más comodidad del paciente y evitar los embarazos múltiples», según Roberto Matorras, jefe de reproducción humana del Hospital de Bilbao y editor del libro blanco sobre esta especialidad.

Algunos informes apuntan que las demandas de tratamiento han caído un 30% por la crisis desde el 2010. El presidente de la SEF corrobora la bajada pero no se atreve a dar un porcentaje. Advierte de que muchas parejas rehúsan el tratamiento no solo por el coste, sino por la situación laboral y los gastos que se derivarían de una maternidad. «Tenemos pacientes de todos los estratos sociales. A algunos les cuesta más reunir el dinero y piden préstamos. Pero les facilitamos una financiación a medida para que todos puedan acceder», subraya Ballesteros.